Tal vez no se haya escrito otra obra que explique más claramente de que se trata la vida cristiana como El Progreso del Peregrino. Esta es una fascinante alegoría de nuestra peregrinación a la gloria magistralmente presentada por medio de personajes como Cristiano, Fiel, Ignorancia, Formalista, Hipocresía, Esperanzado, Prudencia y otros, con los cuales nos podemos identificar en algún momento de nuestra vida.
Esta famosa obra ha sido ilustrada para hacerla especialmente atractiva para los niños. En cada página hay un dibujo que facilita la comprensión del mensaje. Al leer sobre las inquietudes, intereses, temores, anhelos y emociones de estos personajes, las verdades de las Escrituras resaltarán claramente y será evidente su aplicación a la vida diaria.